Cemento y acero mexicano reforzarán Canal de Panamá
Empresas mexicanas proveen cemento y acero para Canal de Panamá
Ingenieros del proyecto de la ampliación del Canal, que inició en 2007 y acabará en 2014, dijeron que usarán 5 millones de toneladas de concreto
NotimexPANAMÁ, 10 de febrero.- La firma mexicana Cemex y la multinacional Arcelor-Mittal, establecida en México, figuran como proveedoras de cemento y acero para la construcción del tercer juego de esclusas en el Canal de Panamá, informó hoy una fuente ejecutiva.
En declaraciones, el gerente del Grupo Unidos por el Canal (GUPC), Antonio Zafaroni, dijo que Cemex tiene un contrato para dotar de cemento a los trabajos en el sector del océano Pacífico.
El cemento para la esclusa que se construirá en el Atlántico es proveído por Cemento Panamá, filial de la colombiana Argos.
Ingenieros del proyecto del tercer juego de esclusas -el principal componente de la ampliación del Canal de Panamá, iniciado en 2007 para finalizar en 2014- señalaron que para los trabajos se necesitarán cinco millones de toneladas de concreto.
El año pasado, el GUPC firmó un contrato con Cemex para la provisión de 500 mil toneladas de cemento.
Mientras, el acero será importado de la planta de Arcelor-Mittal den México y de Costa Rica, indicó Zafaroni.
Unas 300 mil toneladas de acero serán utilizadas en el tercer juego de esclusas, según las proyecciones del GUPC, consorcio integrado por la española Sacyr-Vallehermoso, la belga Jan De Nul, la italiana Impregilo y la panameña CUSA.
Los agregados para el hormigón son elaborados por el GUPSA en una fábrica construida en los últimos 18 meses en el sector de Cocolí, en forma paralela donde se construye el tercer juego de esclusas, al oeste de la capital panameña.
El consorcio inició el pasado 21 de enero el vertido de concreto con lo cual empezó la construcción de la obra permanente con miras a finalizarla a mediados de 2014, en coincidencia con el primer centenario de la actual vía de 80 kilómetros.
La ampliación, en la práctica un nuevo canal, permitirá el paso de embarcaciones que por su tamaño no caben en el actual atajo construido por Estados Unidos entre 1904 y 1914 y controlado por Washington hasta 1999.
Mediante las esclusas los barcos son elevados 26 metros sobre el nivel del mar en su tránsito de un océano a otro.
El proyecto costará cinco mil 250 millones de dólares pagados con los ingresos por peaje de tránsito en la actual ruta.
En declaraciones, el gerente del Grupo Unidos por el Canal (GUPC), Antonio Zafaroni, dijo que Cemex tiene un contrato para dotar de cemento a los trabajos en el sector del océano Pacífico.
El cemento para la esclusa que se construirá en el Atlántico es proveído por Cemento Panamá, filial de la colombiana Argos.
Ingenieros del proyecto del tercer juego de esclusas -el principal componente de la ampliación del Canal de Panamá, iniciado en 2007 para finalizar en 2014- señalaron que para los trabajos se necesitarán cinco millones de toneladas de concreto.
El año pasado, el GUPC firmó un contrato con Cemex para la provisión de 500 mil toneladas de cemento.
Mientras, el acero será importado de la planta de Arcelor-Mittal den México y de Costa Rica, indicó Zafaroni.
Unas 300 mil toneladas de acero serán utilizadas en el tercer juego de esclusas, según las proyecciones del GUPC, consorcio integrado por la española Sacyr-Vallehermoso, la belga Jan De Nul, la italiana Impregilo y la panameña CUSA.
Los agregados para el hormigón son elaborados por el GUPSA en una fábrica construida en los últimos 18 meses en el sector de Cocolí, en forma paralela donde se construye el tercer juego de esclusas, al oeste de la capital panameña.
El consorcio inició el pasado 21 de enero el vertido de concreto con lo cual empezó la construcción de la obra permanente con miras a finalizarla a mediados de 2014, en coincidencia con el primer centenario de la actual vía de 80 kilómetros.
La ampliación, en la práctica un nuevo canal, permitirá el paso de embarcaciones que por su tamaño no caben en el actual atajo construido por Estados Unidos entre 1904 y 1914 y controlado por Washington hasta 1999.
Mediante las esclusas los barcos son elevados 26 metros sobre el nivel del mar en su tránsito de un océano a otro.
El proyecto costará cinco mil 250 millones de dólares pagados con los ingresos por peaje de tránsito en la actual ruta.
